Ser mejor persona es un acto político, Parte 1: Responsabilidad afectiva con Marte junto a Júpiter en Aries

Desde muy niño adquirí varios contratos conmigo mismo, como por ejemplo no ser nunca como mi papá. Por supuesto, sabrán, que eso trajo muchas consecuencias, que sigo vislumbrando y afortunadamente tanto presencial como internamente con mi padre estamos muy bien. Cuento corto, pasé por el no binarismo de género explorando consecuencias que creí resueltas de este sentir. Esto será para otro blog.

Y luego, otro contrato interno fue el de ser mejor persona. Me propuse desde muy pequeño ser mejor persona. Y esto tuvo a través de mis años innumerables cuestionamientos y pruebas, por supuesto (Primera cuadratura de Saturno, con los primeros dientes definitivos).

Así que pondré aquí algunas preguntas sobre este tema, ya que creo que es fundamental, por lo que he visto en mi consulta y en redes, el no darlo por sabido o listo. Entonces, ¿qué es esto de ser mejor persona? ¿mejor según quién? ¿y para qué? ¿de dónde está necesidad u obsesión? ¿no deberíamos todes estar deseando lo mismo? ¿y la reciprocidad, qué hay con ella? ¿y qué tanto puedo equivocarme en el camino? ¿puedo equivocarme en ser mejor persona? ¿y si se equivocan practicando conmigo? ¿está bueno que renuncie a ese contrato? ¿es realmente un contrato de mí, conmigo?

Bueno a pesar de que desde temprano supe que el tema era y es ser mejor que yo mismo, no siempre fue/es fácil sostenerlo de ese modo, el foco más difícil de borrar de todas las amarras que había en cada pregunta que exploré, fue el foco de verme mejor y mantenerme mejor para y por el resto. Por supuesto, sabrán, esto también ha traído una serie de complicaciones, que todavía recolecto y proceso.

Tengo Venus en Acuario y Ascendente en Piscis, realmente la competencia no me interesa como herramienta de desarrollo. Sí es necesaria, sí es una actividad o un impulso que puede darte aliento, energía. Pero es muy fácil desarrollarla de manera viciosa, a costa entonces del sufrimiento ajeno, de ningunear o hacer zancadilla a quien está compitiendo conmigo. ¿Cuántas veces nos hemos visto enfrentades tratando de hacer algo mejor que otra persona, que ni siquiera está atenta a lo que estamos queriendo alcanzar o superar?

James Blake, uno de mis coetáneos favoritos, con Nodo Norte en Piscis y Sol en Escorpio, lo narra muy bien en esta canción:

Así es como resumidamente, exploré bastante todo ese existencialismo.

La energía cardinal en el esquema astrológico tiende a la competencia, con esto me refiero a Aries, Cáncer, Libra y Capricornio. No estuve exento de esto. Sobre esto profundizaré en otro blog. Mi contrato fue conmigo mismo. El intento siempre es competir conmigo. Pero entenderás que el verdugo interno puede crecer mucho para fiscalizar ese contrato.

Estos son años en los que el amor propio se ha ido desglosando en una serie de técnicas. Me gusta que esto emerja en el tiempo de Plutón en Capricornio, es decir, la muerte de la estructura y las apariencias y los abusos de poder en cargos donde la responsabilidad para la cual se te ha elegido no se está cumpliendo (ser presidente y no escuchar a la gente, por ejemplo); esa muerte trae un profundo desarrollo del sentido de amor propio, que creo inicia en el sentido de valía, de hacerlo florecer de nuevo. Sincronizado con esto desde 2018 Urano está en Tauro, y ahora este planeta se unirá a los eclipses entre Tauro y Escorpio en octubre 2022.

Sobre este tema, tratarse con suavidad y ternura es un acto político, y sobre esto Carola Fernández y Sara Luna Aylwin tiene un conversatorio en Instagram muy bueno que te dejo aquí. Bajo las alineaciones que menciono en el título de este texto, te cuento que poner límites es algo que no me sonaba, hasta hace un par de años, como ser parte del paquete de una mejor persona. Entenderás el desorden que acarrea no poner límites.

Algunas personas, amigues, me encontrarán, curiosamente muy llevado a mis ideas, o viviendo una vida muy auténtica. Y en cierto modo, eso no se interfiere con el plano sexoafectivo. Amistades muy íntimas que he desarrollado, también entraron en su momento, en un pantanoso terreno donde a veces me siento atosigado sin saber decir basta, o no puedo, o no quiero.

Sincrónicamente, el año en que rompí con una relación bastante tóxica el año 2013, yo trabajaba en una tienda llamada Amor Propio en Barrio Italia. Trabajé de vendedor. Mi pareja en ese entonces me gritaba en modo desafiante que si acaso ahora, que le negaba cosas yo, era porque yo trabajaba en esa tienda. Una ironía bastante barata. Te estoy escribiendo sobre esto ahora, y tanto ahora como en ese período, hubo eclipses entre Tauro y Escorpio. Motivo por el cual esto será tratado en la segunda parte de este artículo.

El signo de Aries ocupa un espacio en el cielo alrededor de la Tierra como punto de observación, y Marte y Júpiter están allí juntos desde finales de mayo.

Particularmente, el tiroteo de Texas en una escuela primaria fue el 24 de mayo, día en que Marte pasó de Piscis a Aries, el dios de la guerra tiene, como todo planeta, manifestaciones automáticas corrosivas para el tejido social. Donde Marte esté en nuestra carta de nacimiento, nos hablará de cómo entramos a la vida, de cómo salimos a la luz sin más. Junto con el Ascendente y Plutón, hablan para mí de la trinidad psíquica que tira a nuestra personalidad por la borda, sencillamente. Es ese umbral a partir del cual todo nos importa una cáscara de huevo podrido, y requerimos urgentemente hacer espacio para nuestro requerimiento existencial. Para otro blog o mi libro dejaré mi investigación sobre el esquema astro-psíquico de la locura automática (sí, me refiero a la letra del reggaetón).

Muches vivimos, y con fortuna y/o mucha terapia, dejamos de vivir bajo el alero de ideas heredadas por nuestra familia y heridas ancestrales y barriales. Nos atrevemos a vivir nuestro propio impulso, sea contra corriente o a favor según el paisaje que te propongas recorrer. Claramente, a nuestro triángulo marcial, que está tan ocupado haciendo ese espacio para nuestra urgencia personal, se le super-olvida que debemos convivir en este mundo con el Marte de cada ser humane, por lo menos.

Ahí viene Saturno y nos regulamos con él. En fin. Caos.

El 29 de mayo hicieron Júpiter y Marte conjunción en el grado 3'43'' de Aries. Donde tengas este punto en tu carta hablará de aquello que se encendió.

Júpiter aquí trae algo más noble, o bien, irte de birras con el planeta completo para tirarlo por la ventana en una fiesta desbordante, y que con cierta fortuna, literal (porque es Júpiter), no haya represalia alguna.

Sin embargo, he aquí donde también yace la necesidad de iniciar aquello que sientes que te lleva a la mejor versión de ti mismo. A tu lugar como mejor persona.

Personalmente, contemplo hasta 15 grados de distancia con Júpiter, lo que ocurre es que con ambos planetas recién entrando en Aries, no se sentía tanto Marte acercándose 15 grados antes, desde el 18' de Piscis. No obstante, se seguirá sintiendo hasta el 14 de junio, si quieres pensar en 10 grados de distancia, porque Marte estará 15, y Júpiter en el 5 de Aries, para un total de 10 grados de separación.

O bien, tu experiencia dirá, según qué tan marciano seas, literalmente, si este impulso dura hasta el 23 de junio 2022, día en el cual estarán separados por más de 15 grados.

La luna nueva en Géminis, dije que será crucial en el trabajo sobre las emociones junto a Marte, de un modo muy literal, estos son excelentes meses para adentrarse en el campo del trabajo emocional por ser realmente responsable en el campo afectivo, si antes no habías logrado desarrollarlo. Sobre lo que esta Luna implica, su relación con Marte, y teorías de apego y mentalización, te hablo en este artículo pasado.

Me parece que este es un año crucial para atacar todo lo narcicista que se nos escapa de las manos, que causa daño innecesario y que no nos permite entablar relaciones fecundas, fructíferas, honestas, aperturantes. Y digo atacar, muy marcialmente, de Marte, obvio.

El asunto es, que ahora disponemos, hasta el 23, para aprovechar el foco en trabajar. Si no hay voluntad, el trabajo no se verá reflejado. Saturno que comenzó a retrogradar hace un par de días está favoreciendo aquello en lo que te esfuerzas y que es nuevo, propicio para esta energía ariana de Júpiter y Marte.

Si enfocamos todo este Aries en simplemente vivir la vida loca como antes de pandemia, nos vamos a ir a la porra como humanidad.

¿Se puede más?

Sí, se puede.

(Estas líneas están intencionalmente en blanco)

Finalmente, la invitación desde lo astrológico, desde mi astrología, es a abanderarte por tu causa, esa que nace de las vísceras, eso que tal vez nadie más a tu alrededor desea hacer, pero que tú innegablemente sí, mientras, te propones fuertemente abandonar la inercia que te lleva a repetir patrones y seguir postergándote a ser un mejor humane por ti, y por quienes amas. Para el resto del año, tal vez esto se convierta en un peso horrible, porque sólo querremos sentir y fluir, volver al pasado, apegarnos a lo conocido. Pero minuto a minuto, segundo a segundo, marcialmente, en cada respuesta, en cada comentario que hagas, tienes la extra-oportunidad ariana de dañar menos, de ayudar más, de ser más tú, y de ser finalmente, ser mejor.

Álvaro Castro Delgado.